Bueno esta vez no voy a poner los nombres de los que hemos salido de viaje para disfrutar de un gran día de bici, en este caso de carretera, aunque por el estado de las carreteras bien podríamos haber ido con las de montaña.
A las 7.30 habíamos quedado en el parking del Príncipe Felipe, a las 7.45 después de repartir los bultos y bicicletas salimos hacia la Venta de la Pintada, lugar de inicio de la quedada organizada por Roki, a las 9.00 llegamos, tomamos café y como siempre hacemos tarde, el que suscribe salio el ultimo, lo que me sirvió para que me hicieran una bonita foto.
En la Venta de la Pintada siempre se empieza subiendo, aunque el ritmo al que se hacen esos dos primeros kilómetros hoy, nada tiene que ver a como los haces el día de los Degollaos, aprovechamos para sacar unas bonitas fotos y grabar unos videos. Tras unos 7 km. llegamos a Ejulve, el pueblo de las costillas asadas, los que no halláis corrido Degollaos y lo hagáis este año os acordareis de mi al pasar por segunda vez por este pueblo durante la cicloturista.
Comenzamos a ascender el primer puerto de la jornada, aquí sufriremos el primer abandono de la jornada, Mariano rompe la cadena y el cambio, lo que le obliga a abandonar, aun nos acompañaría una parte de la ruta en furgoneta. Hoy el ritmo nos da para ir todos juntitos en la ascensión, pero en la bajada la cosa ya se rompe, descendemos el puerto de Los Degollaos y comenzamos a rodar por las carreteras de los órganos de Montoro, una zona espectacular, en el siguiente descenso pincha Fernando, pero como este va fuerte lo abandonamos a su suerte, no le costara mucho alcanzarnos. Pasamos por el Hotel las Truchas y llegamos el cruce que indica el desvío hacia Pitarque, 3,5 km. de unos paisajes casi pirenaicos, de repente un montón de gravilla, curva a derecha y comienza el sufrimiento, a todos nos coge por sorpresa, es la carretera que asciende directamente hasta el cielo sin ningún descanso, bueno si alguno, con un desnivel del 11%, algunos ponen pie en tierra, otros serpentendao como culebras a todo lo ancho de la carretera consiguen ascender hasta arriba, el estado del asfalto es lamentable, esta completamente lleno de gravilla, lo que hace la ascensión todavía mas dura y por que no decirlo, una vez hecha, mas bonita, los distintos pulsometros, cuentakilómetros y gatchets electrónicos llegaron a dar desniveles del 23% .
Arriba nos esperaba un avituallamiento y reagrupamiento, coca colas, pastelitos, etc., bajada hasta Aliaga, rapidísima y con la misma tónica, gravilla, mucha gravilla, justo antes de empezar el descenso hacia Aliaga se me sale la cadena, tengo que parar, David se queda conmigo para intentar volver a meterme en el grupo pero al final se me va, al llegar a Aliaga en la ultima curva del descenso me patina la rueda delantera y me voy al suelo, sin consecuencias materiales pero dejándome ya completamente descolgado del grupo de cabeza, sigo un rato con Carlos y Chavi y al comienza del ultimo puerto ya me voy solo, poco a poco voy cogiendo ritmo y acabo con un chico del C.C. Aragonés con el cual ya terminare la ruta, volvemos a pasar por Ejulve con esa rampa que te coge completamente frío después de la larga bajada y esos últimos kilómetros con aire lateral.
Justo antes de llegar nos adelanta una furgoneta en la que va Arancha, ha roto el cambio y no ha podido terminar.
Luego, lo mejor de estas rutas, comidita, risas, mentiras, más mentiras, piques, vinito, cafés………… Hasta la próxima.
P.D. Por cierto creo que han abierto un psiquiátrico para bicis, fueron tantas las que se volvieron locas subiendo San Cristóbal y descabalgaron a sus jinetes, que dicen que es un buen negocio.
miércoles, 3 de junio de 2009
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